El oro negro ha muerto. . . ¡¡¡LARGA VIDA AL ORO AZUL! ! !
Mientras el mercado del petróleo se hunde, el mercado del agua se prepara para sustituirlo como el gran mercado del siglo XXI y tal vez de todos los tiempos.
Si por el petróleo fuimos capaces de justificar asesinatos, invasiones y genocidios recurrentes, sin siquiera ser necesario para la vida, qué no seremos capaces de hacer por el agua?
La guerra por el "Oro Azul" ha comenzado, y el primer paso de los grandes inversores es conseguir que las reservas dejen de estar protegidas por la legislación de los estados, que levanten la regulación y el agua pase a ser considerada una materia prima más, como el Petróleo o el Oro mismo. Con los países al borde de la quiebra y más necesitados de dinero que nunca, la privatización de las reservas está cada vez más cerca.