José Manuel Peramás, de origen catalán, nació el 17 de marzo de 1732. Habiendo ingresado en la Compañía de Jesús, fue destinado a tierras americanas en el año de 1755, llegando a fines del mismo año a Córdoba del Tucumán. Trabajó en la reducción de San Ignacio Miní algún tiempo, pero luego volvió a la ciudad de Córdoba para hacerse cargo de la cátedra de retórica y de teología moral. Se destacó particularmente en las humanidades y le fue confiada la redacción de las Cartas Annuas de la Provincia de Paraguay. Entre sus notables escritos, encontramos el Diario del destierro, testimonio privilegiado de la expulsión de los jesuitas. Desterrado de las tierras americanas por la Real Cédula de Carlos III en 1767, fue confinado junto con sus compañeros en los Estados Pontificios. Al dolor del destierro y la expulsión, llega la noticia, en 1773, de la supresión de la Compañía de Jesús. En este doloroso marco histórico, el padre Peramás encuentra la muerte en 1793 cuando contaba con 61 años. De los 48 años de su vida religiosa, 26 años corresponden al destierro.