Marc Wilson no se da por vencido. A pesar de las dificultades que enfrenta y de la decisión de su padre de vender, está decidido a conservar la empresa familiar. El problema es que se están retrasando en la entrega de más y más proyectos y sus clientes ya no lo toleran. Marc está buscando la solución por todas partes, cuando en una de sus clases del MBA descubre un enfoque único que ve a las operaciones en términos de flujo.
El concepto de flujo es sencillo. Es fácil visualizar el flujo de los proyectos que pasan por el sistema y comprender que, si algo lo obstruye, los proyectos se acumulan, que el tiempo de entrega se alarga y, como resultado, la confiabilidad de las fechas de entrega se ve afectada. Lo que no es tan fácil es descubrir los obstáculos específicos que obstruyen el flujo y descifrar cómo eliminarlos.
