Gijó n, verano de 1929. La joven Manuela entra a trabajar como criada en la mansió n de los marqueses de Armayor. Entablará una amistad inquebrantable con la ú nica heredera de la familia. Añ os despué s, la Guerra Civil le obliga a separarse de su hija, enviada a Rusia junto con otros niñ os de la zona republicana. Su amiga será su mayor apoyo.